Vivir en lo absurdo

A menudo me pregunto ciertas cuestiones y la respuesta que obtengo no me gusta nada, básicamente porque es lo más absurdo con lo que quizás me haya encontrado en mi vida. Pero entiendo que somos así, creemos engañar a los demás cuando únicamente nos engañamos a nosotros mismos. La vida no es como la vemos, no controlamos las situaciones, la vida y las situaciones nos manejan a nosotros y no nos damos cuenta.

Y lo peor de todo es que intentamos explicar lo inexplicable, aclaramos lo que nadie nos pide que aclaremos, mentimos creyendo que alguien nos creerá, andamos sin saber a dónde vamos.

Lo absurdo es precisamente eso, no querer la verdad cuando nos duele, no ver un problema y pensar que así no lo tenemos, mentir creyendo que nos hacemos un favor cuando en realidad nos estamos haciendo daño, por ejemplo, mentir al médico con un "no bebo" o "no me drogo" o diciéndole que comes bien cuando no comes nada, mentimos demasiado, mentimos queriendo salvarnos de una escena en la que nunca fuimos llamados a actuar.

Y sí, es absurdo querer continuar con lo que no tiene continuidad, ¿por qué forzar situaciones irracionales? Si hoy es una situación difícil que no queremos solucionar, mañana será peor.

La sensación agradable que podemos encontrar en un "se lo ha creído" llegará a ser le desagrado más incoherente cuando todo se nos vuelva en contra.

Los problemas estarán siempre ahí aunque no queramos verlos, llegará un día en el que las mentiras nos golpearán tan fuerte que pensaremos que fue mejor no decirlas, la caída será tan grande que nos hubiera traído más cuenta no dar nunca un paso atrás.

Todo esto, vivir de mentira, nos hará esclavos de nuestro ser, pasando del deleite de creer hacer las cosas bien a no poder aguantar un peso demasiado insoportable, porque nuestra vida y en consecuencia nuestro ego se construyó de la forma más absurda posible, engañando a quien nos podía ayudar, mintiendo a la verdad, huyendo siempre de las dificultades y dándole constantemente la bienvenida a la falsedad y a la ficción.

Nunca crearemos algo útil o productivo, nunca estableceremos un sentimiento real y sincero hacia nosotros que permanezca en el tiempo, nunca concebiremos una vida sin nosotros, nunca seremos esa persona que entendíamos que éramos.

Y absurdo es no aprender ni creer en los demás, absurdo es esperar algo que no llegará, absurdo es vivir sin pasión, absurdo es no ver lo que tienes delante.