Justificante de paso

La vida se puede vivir de multitud de formas, uno puede ser atrevido, puede ser tímido, puede ser feo, guapo, gordo, flaco, capaz, incapaz, coherente o incoherente .... la vida tiene mil maneras de vivirla.

Podemos vivir siendo felices o al menos podemos vivir intentándolo, podemos ir sembrando día a día buscando tener frutos, tener esa cosecha que algún día justifique que estuvimos aquí, que vivimos, Esa cosecha puede tener forma de descendencia, puede manifestarse mediante actos, puede dar sus frutos durante nuestra vida o, si no se es caprichoso y egoísta, pueden recogerla los demás cuando ya no estemos. Como hay mil formas de vivir también hay mil formas de cosechar, bien o mal, podemos dejar un legado propio de dictadores egocéntricos o podemos dejar una cosecha en forma de filosofía para que aquellos que nos conocieron intenten vivir buscando esa felicidad tan anhelada por todos y tan difícil de conseguir.


¿Cómo queremos que nos recuerden? Pues entre otras cosas que viví siendo una persona leal, una persona que intentó siempre hacer las cosas como las cosas quieren que se hagan, agradeciendo al bondadoso e ignorando al perverso, una persona que veía la crueldad y la maldad pero que callaba esperando que todo aquello tornase hacía el lado bueno (aunque sabía que eso era imposible): el cruel siempre será cruel, aunque vea la muerte de cerca. Viví alzando la voz cuando mi silencio no me dejaba dormir, el silencio que esperaba la justicia que ya digo que nunca aparecía. Quedaba el consuelo de esperar, de esperar todo lo que hiciera falta puesto que sólo el tiempo es el único juez que pone a cada uno en su sitio, el único juez que hace justicia y que sentencia.

Hay personas que quieren justificar su presencia, su trabajo, su actitud, todo esto mediante la emisión de un justificante que acredita dicha acción, ¿por qué? ¿Se justifica uno mismo?
Creemos que un simple papel, una simple justificación nos librará de alguna responsabilidad personal.

- Vale, no hice nada, pero ..., ¿me puede dar un justificante de que he estado aquí?
- ¿Para qué? ¿Para que otros sigan tu ejemplo?

No sé si la vida es más propia de los vivos o de los muertos. Muchos vivos no merecen vivir puesto que no dejarán recuerdos de su paso por la vida. A muchos muertos los recordaremos siempre por algo que hicieron, porque justificaron su vida, y esos vivirán siempre.

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