Los Seres ¿Queridos?

Reconozcamos lo evidente, somos como somos, pero ... ¿mostramos nuestro verdadero yo al mundo?

Transitamos por la vida en la mayoría de los casos intentando caer bien a la gente, unas veces mostrando aparente bondad, otras diciendo lo que algunos quieren escuchar y en ocasiones utilizamos el humor. Y todo esto a personas que realmente no nos importan, pero ... ¿y a las que nos en teoría nos importan?

Si hablamos de sentimientos hemos de decir que viniendo del corazón (o del alma)  son opuestos a la inteligencia o la razón pero, para que sean tenidos ha de haber algo que los mueva y sobre todo que los mantenga en el tiempo. Quizás el amor, aunque es sumamente complicado, quizás huellas dejadas, pero nunca, absolutamente nunca, una relación sin afecto nos creará esos sentimientos emanados del corazón. No se trata de un flechazo, se trata de algo mucho más grande.

El amor implica comprensión, saber reconocer que algunas cosas pueden disculparse porque fueron hechas o dichas en un momento en el que no se pensó lo suficiente. Puede pasar. Si esos momentos se repiten frecuentemente ya no podemos achacar la culpa a un calentón, ya habrá que ir más allá.

Cuando una persona frecuenta momentos de inmoralidad podríamos decir que va reuniendo una condición en la que la nobleza brilla por su ausencia. Amar a esta persona se antoja complicado puesto que por mucha comprensión que queramos darle, nuestra capacidad para entender ciertos comportamientos no llega a concebirlos.

Entonces ... ¿hay que amar a la fuerza? Rotundamente no. Hay que amar a quien se gana el amor, hay que respetar a quien se hace respetar y hay que honrar al honrado. Sea quien sea, haga lo que haga o diga lo que diga.

Nuestro padre, nuestra madre, nuestro hermano, nuestra hermana, ... ¿estamos obligados a amar a nuestros seres queridos? Si comprendiendo amamos hemos de entender lo contrario. Si una persona, sea quien sea, no se gana tu amor no estás obligado a amarla. No te llegan razones para amarla y, cuando te llegan, son contrarias a tu entendimiento de qué es el amor.

No se trata de las personas, se trata del amor. ¿Amas? ¿Te aman? En muchas ocasiones crees amar o crees que te aman y es mentira. Esa falsa fidelidad que le damos a muchos seres "queridos" nos hace creer que la vida es bonita y que el amor existe. Nos hace creer incluso que algún día harán algo sumamente difícil por nosotros ... todo mentira. Seamos sinceros, ni los amamos ni nos aman, todo se reduce a que supuestamente son y somos seres queridos y nos ha de unir un falso afecto.

Todo el mundo ha de ganarse un sitio en nuestro corazón y nosotros hemos de hacer lo mismo con el corazón de los demás. ¿Hay algún camino ya hecho? Pues no, todo camino ha de hacerse, desde el que une a un padre con un hijo, hasta el de una pareja o el de dos hermanos.

¿Quién nos ayudará cuando nos haga falta? Sólo quien nos quiera, independientemente de que sea de nuestra familia o no.