Una lucha constante

¿Qué es vivir?
Puede ser el tener vida y que dure mucho, vale, se acepta, o ir tirando, con comida y una casa, aquello de "vivir" bien, pues sí, habitar, llevar una forma de vida, ..., muchas acepciones caben en la palabra "vivir", la mayoría de ellas utilizadas por la gente, por la gente común y un concepto fundamental de esta palabra no es usado prácticamente por nadie porque supone una molestia o una incomodidad y que no es otro que sentir profundamente lo que se hace o disfrutar con ello.
Este significado de vivir es practicado por aquellas personas luchadoras, capaces de todo (o al menos de intentarlo) a las que nunca le valdrá una excusa barata para conformarse y dejar de luchar.

Visto lo cual, efectivamente la mayoría de nosotros vivimos en muchísimos casos por vivir, llorando las penas que no supimos remediar, mostrándonos al mundo como un saco de paja, que ni hace ni sufre, vagabundeando sin valentía ni coraje esperando que otros resuelvan nuestros problemas, dejando el tiempo pasar, soplando velas cada trescientos sesenta y cinco días si es que alguien se encarga de que soplemos y dejando que el azar sea el encargado de velar por nuestro destino.

Hay infinidad de cuestiones que distinguen a las personas según hagan, digan o vean, por ejemplo. No es recular, es corregir, no es aparentar, es ser, no es estar cansado, es hacer, no hay imposibilidad, hay intentos por conseguir, no hay paz si no se lucha.
La gente que no quiere luchar ve el error cometido y no ve la corrección, ríen cuando aquellos que luchan cometen los mismos desaciertos que ellos pero no ven la rectificación de los que quieren hacer bien las cosas y no de cualquier manera. Ellos, los pusilánimes, ante un error cejan en su empeño de querer hacer las cosas y retroceden porque la lucha no va con ellos.

La vida es una lucha constante por todo, desde niño hasta que su vida se está apagando. Quizás la niñez sea ese período en el que no parece que estemos luchando, incluso la adolescencia puede engañar a la lucha pero posiblemente todo lo que venga detrás conlleva una lucha.


¿Qué tipo de lucha? La que cada uno quiera emprender.
Vivir con tu pareja, tener hijos (y que tengan educación y coman de todo), vivir motivado y motivando, pelear cuando una pelea valga la pena, llorar cuando haya que llorar, ir cuando haya que ir, hacer y no dejar de hacer y estar y no dejar de estar. 
Lo fácil es decir no puedo (cuando en realidad se querría decir no quiero), lo fácil es dejar que la vida vaya transcurriendo sin que nos duela demasiado la cabeza, lo fácil es decir siempre "vale", agachar la cabeza incluso cuando tenemos razón o estremecernos por alguna película cuando no lo hicimos por algún ser al que deberíamos haber querido (y haberlo demostrado).

La persona luchadora normalmente es incansable, se levanta y se vuelve a levantar y aunque le cueste un esfuerzo levantarse, una vez en pie sigue con su lucha, una lucha diaria, una lucha con un objetivo sobresaliente de los demás, vivir, sintiendo lo que se hace, emocionándose con ello y si se hace disfrutando, mejor.

Todo el mundo tiene las mismas obligaciones y los mismos derechos pero no todos se los toman de la misma forma, unos son mas de derechos y luchan por tenerlos y en cuanto a las obligaciones ... no todo el mundo lucha por tenerlas.
Nadie te va a esperar a que se te antoje un día luchar por vivir digna y coherentemente, nadie te echará de menos cuando ya no estés, nadie ... es lo que fuiste.

La raza humana es así, aquellos que no luchan, los débiles, son los que hablan y señalan. El luchador se dedica a no hablar y a hacer, a no dejar de hacer, entiende que la vida es un paseo repleto de problemas de fácil o difícil solución, pero con solución. Los débiles se ahogan en cualquier problema y lo solucionan siempre de la misma manera: "llorando" con o sin lágrimas. El luchador, incluso entre sollozos, sigue enfrentándose a todo aquello que perturba la estabilidad de los suyos, ganando o perdiendo vida pero nunca dejando de batallar para tener siempre un final feliz (o hacer que lo parezca).

"Si el miedo es algo que todos sentimos, ¿quién es más valiente? ¿el que no lo muestra y no lo afronta o el que lo muestra pero sí lo afronta?"

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